Durante los últimos siete días, he estado recordando mi adolescencia y los juegos con los que me apetecía enredar.
El tanteo ha sido interesante, porque incluso surgió una clasificación. Una en la que incluía los juegos más tradicionales, y otra en la que encajaban aquellos con un perfil más extravagante. Y siguiendo por este camino, tropecé con una actividad que nunca llegué a experimentar y que ahora, con una conciencia del peligro más desarrollada, tengo más reparos para practicarla.
Me refiero al patinaje sobre ruedas. Ya… ya sé que deben estar preguntándose que cómo es posible, pero una drástica experiencia paterna, y una mala experiencia personal con un monopatín, me quitaron las ganas de ponerme a rodar… aunque no el gusanillo.
Y ha sido con esta inquietud, con la que esta semana he estado indagando sobre el mundo de los patines around the world wide web. Y el resultado han sido 202 páginas en español y unas 6.300 en inglés. Todo un entretenimiento, of course.
Este abismo de páginas, al principio sólo logró confundirme, así que decidí empezar averiguando qué se cocía en el mundillo de las cuatro/cinco ruedas. Y para estos menesteres, lo mejor fue rebuscar entre blogs de aficionados y expertos. De entre los más interesantes: LO MÍO ES PATINAR y POR EL MUNDO SOBRE UNOS PATINES , donde un sin fin de rutas , visitas, circuitos, concursos y maratones, proyectan el lado más urbano del patinaje, con ruedas en línea y un equipo perfectamente diseñado para evitar malos golpes.
Pero si cabe la expresión, también existe un lado más snob, en tanto que retro, por el uso de los clásicos de cuatro ruedas o quads (a ser posible blancos), que se pueden adquirir on line, al igual que el resto de modelos en todas sus formas y colores. Mención especial a los diseñados por Armani.
El uso de patines sobre ruedas aunque data de 1790, no llegó a patentarse hasta 1819 en Francia. Y desde entonces hasta ahora, no sólo ha habido una gran evolución, sino que además su uso ha quedado plasmado en cientos de películas, series y videoclips. Aunque como reconocida serie adicta, he de decir que quizá la escena sobre patines que no puedo olvidar, ni dejar de reírme al recordarla, es la del capítulo 13, de la primera temporada de Malcom in the middle:
Patinar, o lo que es lo mismo, deslizarse sobre ruedas, es además sinónimo de urbano, velocidad, esquivo, juventud, movimiento, o diversión; conceptos que también han servido a muchos creativos publicitarios, como apoyo para resaltar las cualidades, de los productos que representaban. Hablamos de gigantes empresariales como Coca-Cola, Mc Donalds, Mercedes, Opel, o L’oreal. Aunque si hay que elegir uno, me quedo con el último anuncio de Evian y su canción de los ’70 “Rapper's Delight” de The sugar hill gang:
Sin más, shhhhhh! silencio, seguimos rodando, aunque de momento yo me conformaré con el diseño de Harry Allen, para mantener mis libros en línea.
